El Congreso de Tabasco aprobó con 21 votos a favor, dos en contra y tres abstenciones, la reforma el Código Penal que endurece las penas por impedir la ejecución de obras públicas, o realizar bloqueos de calles.
La reforma contempla la inclusión de un nuevo tipo penal, denominado “Impedimento de ejecución de trabajos u obras” para castigar “al que careciendo de facultad legal, impida o trate de impedir por cualquier medio, la ejecución de trabajos u obras privadas”, se le impondrá una pena de prisión de entre seis y 13 años de cárcel.
Los diputados del PRI y algunos del PRD argumentaron que el dictamen buscaba criminalizar a quienes protestan por reclamos no atendidos.
La oposición reclamó a Morena que ha olvidado que la protesta es parte de su origen y que ayudó a su crecimiento.
Al menos cuatro diputados pidieron regresar el dictamen a Comisión Ordinaria de Seguridad Pública, Procuración de Justicia y Protección Civil e incluso hacer una consulta, lo que celebraron ciudadanos presentes en el pleno.
Sin embargo, la votación en contra fue aplastante: solo 8 legisladores votaron por la moción suspensiva, mientras que 21 votaron por proseguir la discusión y votación.
Luego de la votación en lo general, los diputados aprobaron la modificación al artículo 308 Bis: que se incrementaron las penas y se especificó que se aplicarán a quien extorsione, coercione o trate de imponer cuotas o la realización de obras públicas.
“Al que extorsione, coercione, intente imponer o imponga cuotas e impida total o parcialmente el libre tránsito de personas vehículos, maquinaria, equipo especializado o similar para la ejecución de trabajo de obra pública o privadas en las vías de se impondrá de 6 a 13 años y multa de mil a 2 mil veces el valor diario de la unidad de medida y actualización.